Tipos de baterías para coches

Las baterías son el corazón eléctrico de cualquier vehículo: almacenan la energía necesaria para arrancar el motor y alimentar todos los sistemas eléctricos. Sin embargo, no todas las baterías de coche son iguales. Existen diferentes tipos diseñados para distintas necesidades y tecnologías de vehículos. En este artículo exploraremos los tipos de baterías para coches, centrándonos en las baterías de 12 voltios típicas de los coches de combustión interna, y dedicaremos un apartado a las baterías en vehículos eléctricos e híbridos. Además, mencionaremos las tendencias futuras y avances emergentes en esta materia. El objetivo es ofrecer una guía seria y profesional, útil tanto para mejorar el SEO de nuestro sitio web de taller como para informar claramente al cliente final.

Baterías de 12V en coches de combustión interna

La mayoría de los automóviles con motor de gasolina o diésel emplean una batería de 12 voltios (también llamada batería de arranque) para encender el motor de combustión y alimentar elementos eléctricos (luces, radio, sensores, etc.) cuando el alternador no está en marcha. Históricamente estas baterías son de plomo-ácido convencionales, y aunque la tecnología ha evolucionado, siguen siendo las más comunes por su eficacia y costo accesible. A continuación, describimos los principales tipos de baterías de 12V utilizadas en coches de combustión interna:

  • Batería de plomo-ácido inundada (convencional): Es la batería tradicional SLI (Starting, Lighting, Ignition). Contiene placas de plomo sumergidas en un electrolito líquido de ácido sulfúrico. Son las más utilizadas por su precio asequible y eficacia en vehículos estándar. Requieren cierto mantenimiento: en las versiones antiguas era necesario revisar el nivel de agua destilada periódicamente. Las modernas vienen selladas como "libres de mantenimiento" (a menudo incorporan aleación de calcio en las placas para reducir la evaporación). Su desventaja es que toleran peor las descargas profundas y su vida útil típica ronda 3-5 años en uso normal.
  • Batería EFB (Enhanced Flooded Battery): Es una versión mejorada de las baterías inundadas, pensada para vehículos con sistema start-stop básico. Emplea materiales aditivos (como una capa de polifibra en la placa positiva) que le otorgan el doble de ciclos de vida que una batería convencional. Las EFB soportan más encendidos y cargas parciales, por lo que suelen montarse en coches de gama media o compactos con start-stop, o en vehículos sin start-stop pero que demandan más de la batería (p. ej., uso frecuente en ciudad con muchos arranques). Si tu coche vino con batería EFB de fábrica, conviene reemplazarla por otra igual o incluso por una AGM si buscas prestaciones superiores.
  • Batería AGM (Absorbent Glass Mat): En este tipo de batería de plomo-ácido el electrolito está absorbido en separadores de fibra de vidrio, en vez de líquido libre. Son baterías selladas y sin mantenimiento, muy resistentes a vibraciones y con alta durabilidad. Entregan mayor potencia de arranque en frío y toleran mejor los ciclos de carga/descarga profundos. Por estas características, las AGM son ideales para vehículos modernos de alta demanda eléctrica, por ejemplo: coches de gama alta con muchos accesorios, sistemas avanzados (ADAS, audio potente, etc.) y especialmente vehículos con start-stop avanzado y recuperación de frenada. De hecho, muchos autos con sistema start-stop requieren batería AGM y no se debe sustituir por una convencional, ya que el sistema de gestión electrónica de carga está calibrado para AGM. Las AGM suelen tener un costo más elevado, pero ofrecen confiabilidad superior y mayor vida útil en condiciones exigentes.
  • Batería de gel (Gel cell): Es otra variante VRLA (Valve Regulated Lead Acid, batería regulada por válvula) como la AGM. En las baterías de gel el electrolito líquido está mezclado con sílice, formando un gel espeso. Esto también las hace selladas y sin mantenimiento, evitando derrames. Toleran bien descargas profundas y ciclos prolongados, por lo que se usan frecuentemente en aplicaciones de ciclo profundo (por ejemplo, en caravanas, carros de golf o sistemas auxiliares). Sin embargo, en automoción convencional no han ganado tanta popularidad porque su capacidad de suministro de corriente de arranque en frío es algo menor que en las AGM de similar tamaño. En resumen, una batería de gel ofrece larga vida y es muy segura, pero para un coche común que requiere picos altos de corriente (arrancar el motor) suele preferirse AGM o EFB.
  • Batería de iones de litio de 12V: Aunque la gran mayoría de turismos siguen usando baterías de plomo-ácido, en años recientes han surgido baterías de litio (generalmente de tipo LiFePO₄ o similares) en formato 12V como reemplazo de las tradicionales. Estas baterías de litio para 12V ofrecen ventajas claras: son mucho más ligeras, pueden entregar la misma potencia de arranque con menor tamaño, tienen una vida útil más larga (soportan más ciclos de carga) y mantienen el voltaje más estable. Algunos fabricantes de coches deportivos o de lujo han empezado a equipar baterías auxiliares de litio para ahorrar peso. Por ejemplo, Tesla sustituyó la batería de 12V de plomo en sus Model S/X más recientes por una batería de iones de liti. Eso sí, su costo es más elevado y requieren una electrónica de protección (BMS) para cargar y operar con seguridad. Se espera que con el tiempo las baterías de litio de 12V vayan reemplazando a las de plomo-ácido en más vehículos, especialmente a medida que también se introduzcan sistemas de mayor voltaje (como redes de 48V) en automóviles convencionales. Por ahora, en coches de calle, las de litio de 12V se ven sobre todo en sustituciones aftermarket o en modelos muy específicos, pero representan una tendencia futura interesante por sus beneficios en fiabilidad y mantenimiento (prácticamente no sufren sulfatación ni autodescarga significativa).

¿Cuál elegir?

A la hora de reemplazar la batería de tu coche, siempre se debe respetar el tipo recomendado por el fabricante. Si tu vehículo tiene start-stop, asegúrate de montar una batería compatible (EFB o AGM según corresponda); una batería inadecuada puede causar fallos en el sistema start-stop y otros sistemas electrónicos. En caso de vehículos estándar sin start-stop, una batería de plomo-ácido convencional suele ser suficiente, aunque no está de más optar por una de tecnología superior (por ejemplo, AGM) si el coche tiene muchos accesorios eléctricos o uso intenso urbano. Ten en cuenta que instalar incorrectamente una batería nueva puede provocar errores electrónicos o daños en la centralita del coche, por lo que siempre es aconsejable realizar el cambio en un taller profesional. (De hecho, en nuestro blog tenemos un artículo dedicado a las causas y soluciones si el coche falla tras cambiar la batería, que puedes consultar para más detalles.)

Baterías en vehículos eléctricos e híbridos

Los vehículos eléctricos (EV) y vehículos híbridos utilizan baterías, pero de un tipo muy distinto a la batería de 12V de los coches de combustión. En un coche eléctrico puro, la batería principal es un pack de alto voltaje (normalmente cientos de voltios) que alimenta el motor o motores eléctricos. Estas baterías de tracción suelen ser de iones de litio de gran capacidad, con distintos químicos como NMC (Níquel-Manganeso-Cobalto), NCA (Níquel-Cobalto-Aluminio) o LFP (Litio Ferrofosfato), entre otros, según el fabricante. En los primeros híbridos como el Toyota Prius clásico se empleaban baterías de Hidruro de Níquel-Metal (NiMH), muy duraderas; hoy en día la mayoría de híbridos y eléctricos recurren a baterías de iones de litio por su mayor densidad de energía.

Batería de tracción vs batería auxiliar: Es importante destacar que, además del gran batería de tracción, casi todos los coches eléctricos e híbridos también llevan una batería auxiliar de 12V muy similar a la de cualquier coche convencional. ¿Por qué un eléctrico necesita una batería de 12V? Básicamente, por seguridad y compatibilidad. Los sistemas auxiliares del vehículo (luces, cerraduras, equipos electrónicos, airbags, dirección asistida, etc.) siguen funcionando a 12V o menos, igual que en cualquier coche, para aprovechar componentes estándar y evitar riesgos. Si se intentase alimentar todos esos sistemas desde la batería de alta tensión, sería peligroso y complejo: cualquier intervención o avería menor implicaría trabajar con cientos de voltios, lo cual no es práctico. Por eso los EV incorporan un sistema eléctrico de bajo voltaje (12V) separado del sistema de propulsión de alto voltaje. La batería de 12V en un eléctrico actúa de manera muy similar a la de un coche convencional: alimenta los accesorios y sistemas de control, y además habilita el encendido del vehículo (cierra relés de potencia, inicia los computadores, etc.). De hecho, si la batería de 12V de un coche eléctrico está descargada, el vehículo no “arranca” aunque su batería principal de alto voltaje esté llena, porque la electrónica de potencia no llega a activarse sin el suministro de 12V. Afortunadamente, estas baterías de 12V en EV pueden recargarse mediante un convertidor DC/DC desde la gran batería principal mientras el coche está en marcha o cargando, ya que obviamente los eléctricos no tienen alternador.

En cuanto a tipos de baterías de tracción, prácticamente todos los eléctricos modernos usan iones de litio, pero con diferentes composiciones químicas como mencionamos. Por ejemplo, LFP (Litio-Fosfato de Hierro) es apreciada por su seguridad y larga vida, aunque tiene algo menos densidad de energía; NMC y NCA tienen mayor densidad energética (más autonomía) a cambio de usar metales más costosos. Los fabricantes eligen la química en función de si priorizan alcance, costo, potencia, etc. Existe mucha investigación en curso para mejorar estas baterías: desde nuevas mezclas (por ejemplo, añadir silicio en el ánodo para aumentar capacidad) hasta conceptos totalmente nuevos como las baterías de estado sólido. Las baterías de estado sólido usan un electrolito sólido en vez de líquido, lo que promete duplicar la densidad de energía y reducir drásticamente los tiempos de carga, manteniendo mayor seguridad. Marcas como Nissan han anunciado planes de lanzar vehículos con baterías de estado sólido hacia 2028, lo que podría ser un salto importante en esta tecnología. (Hablaremos más de tendencias futuras en la siguiente sección.)

¿Y los coches híbridos? Los híbridos enchufables (PHEV) y híbridos no enchufables (HEV) combinan un motor de combustión con uno o más motores eléctricos, por lo que llevan ambos tipos de baterías: una de alto voltaje (generalmente más pequeña que la de un EV puro) y la típica batería de 12V. En un híbrido típico (no enchufable), la batería de alto voltaje se recarga con el motor de combustión y la frenada regenerativa, asistiendo al motor térmico para reducir consumo. En un PHEV, la batería de alto voltaje es de mayor capacidad y permite circular en modo eléctrico varios kilómetros, además de poder recargarse enchufándola a la red. Estas baterías en híbridos suelen ser también de iones de litio hoy día, salvo en algunos modelos más antiguos. Los híbridos cuentan con la ventaja de que reducen las exigencias a la batería de 12V (ya que el motor de combustión se enciende con apoyo eléctrico del sistema híbrido), pero igualmente la siguen utilizando para los sistemas auxiliares y arranque inicial.

Impacto ambiental

Una pregunta frecuente es si la fabricación y eliminación de las baterías (especialmente las grandes de vehículos eléctricos) las hace menos ecológicas. La respuesta requiere analizar el ciclo de vida completo. Diversos estudios han mostrado que si bien fabricar un coche eléctrico -y su batería- genera más emisiones de CO₂ que producir un coche de combustión, luego durante su uso el eléctrico emite mucho menos, compensando el balance. Por ejemplo, un informe del ICCT de 2025 indica que producir un coche eléctrico (principalmente por la batería) supone aproximadamente un 40% más de emisiones de CO₂ que un coche equivalente de gasolina, pero esas emisiones extra se compensan tras unos 17.000 km de uso (en uno o dos años de conducción). A partir de ese punto, el vehículo eléctrico resulta claramente más favorable para el clima gracias a la ausencia de emisiones de escape y a que la generación eléctrica es cada vez más limpia. En resumen, las baterías de los coches eléctricos no hacen al eléctrico peor para el medio ambiente en conjunto; más bien, son la clave de por qué a largo plazo producen hasta 70-75% menos emisiones totales de gases de efecto invernadero en comparación con un gasolina. Eso sí, es fundamental gestionar adecuadamente el reciclaje de estas baterías al final de su vida útil para minimizar residuos y recuperar materiales valiosos (litio, cobalto, etc.), un campo que está avanzando rápidamente en eficiencia. (Hemos profundizado en el tema de contaminación y baterías en otro artículo del blog, por si el lector desea más detalles científicos y fuentes).

Tendencias futuras en tecnología de baterías

El mundo de las baterías para automoción está en constante evolución. Algunas tendencias emergentes que conviene seguir de cerca son:

  • Baterías de estado sólido: Como mencionamos, los principales fabricantes investigan esta tecnología, que reemplaza el electrolito líquido por materiales sólidos. Las baterías de estado sólido prometen mayor densidad de energía (más autonomía o baterías más pequeñas), cargas más rápidas y menor riesgo de incendios o fugas, al no contener líquido inflamable. Varias compañías (Toyota, Nissan, Volkswagen, entre otras) han anunciado progresos significativos, y se estima que podrían empezar a comercializarse en la segunda mitad de esta década. De lograrse su industrialización, podrían ser un cambio de juego para los coches eléctricos, permitiendo por ejemplo duplicar la capacidad sin aumentar peso, o lograr 80% de carga en pocos minutos. No obstante, aún quedan desafíos en costo y producción masiva antes de verlas en vehículos de calle en grandes volúmenes.
  • Sistemas de 48V y micro-hibridación: En los coches convencionales comienza a aparecer un segundo circuito eléctrico de 48 voltios para alimentar sistemas auxiliares de alto consumo (compresores de aire acondicionado eléctricos, turbo eléctricos, dirección, etc.) y motores/generadores pequeños en los llamados mild-hybrid. Estas redes de 48V van acompañadas de baterías Li-ion específicas. El aumento a 48V reduce pérdidas y permite apoyar al motor de combustión mejor (por ejemplo, el sistema start-stop es más suave y puede asistir en aceleraciones). Aunque los 48V no reemplazan aún al sistema de 12V (que sigue presente con su batería para los demás servicios), son un escalón hacia vehículos más eficientes. Es de esperar que en el futuro más vehículos incorporen sistemas de doble voltaje (12V+48V) o que incluso lleguen a migrar completamente a 48V en ciertos segmentos, obligando a usar baterías auxiliares de litio de mayor voltaje.
  • Baterías de 12V de litio generalizadas: Ya comentamos que Tesla y otros están cambiando las baterías auxiliares de plomo-ácido por baterías de litio de 12V en algunos modelos. A medida que baje el costo del litio y se busque reducir el mantenimiento, es muy probable que los coches tradicionales adopten baterías Li-ion de 12V de fábrica en el futuro cercano. Sus ventajas en clima frío, mayor vida útil (podrían durar toda la vida útil del coche sin reemplazo en algunos casos) y menor peso las hacen atractivas pese al costo inicial. Además, algunas baterías de litio pueden comunicarse con la electrónica del coche (baterías inteligentes) para optimizar su gestión. En resumen, vemos una tendencia a que el venerable plomo-ácido, tras más de 100 años dominando el arranque de los coches, sea eventualmente sustituido por tecnologías más modernas en pro de la eficiencia y la reducción de peso.
  • Nuevos materiales y sostenibilidad: En paralelo, se investiga el uso de materiales más abundantes y económicos para baterías de tracción, como las baterías de sodio-ion (que podrían abaratar costes al prescindir de litio y cobalto) o incorporar grafeno en electrodos para mejorar la conductividad y capacidad. También la industria está mejorando los procesos de reciclaje de baterías: ya existen métodos para recuperar hasta el 95% de los metales críticos de una batería Li-ion, lo cual será vital conforme lleguen al final de su vida las primeras generaciones de coches eléctricos. El objetivo es que las baterías del futuro no solo sean más potentes, sino también más ecológicas en todo su ciclo de vida.

Conclusión: eligiendo y cuidando la batería adecuada

En conclusión, conocer los tipos de baterías disponibles nos ayuda a tomar mejores decisiones para nuestro vehículo. Los coches de combustión interna usan principalmente baterías de 12V de plomo-ácido (en sus variantes convencional, EFB, AGM o gel), mientras que los vehículos eléctricos e híbridos incorporan avanzadas baterías de alto voltaje (generalmente de iones de litio) además de una batería de 12V auxiliar similar a la de los coches tradicionales. Cada tipo de batería tiene sus ventajas, usos apropiados y requerimientos de mantenimiento.

Es importante revisar periódicamente el estado de la batería de 12V de tu coche (un síntoma de desgaste es un arranque perezoso del motor o caída de tensión). Por lo general, las baterías de arranque pierden efectividad tras ~4-5 años, por lo que conviene probar su carga y capacidad de arranque llegado ese tiempo. Un fallo de batería puede dejarte tirado, pero se puede evitar con un mantenimiento preventivo básico. En nuestro taller ConecTaller contamos con equipo de diagnosis para comprobar el estado de tu batería y del sistema de carga (alternador), ofreciendo servicio de sustitución de baterías con garantía. Si notas algún problema eléctrico en tu vehículo o crees que la batería ya no rinde como antes, no dudes en acudir a nuestros servicios. Te asesoraremos sobre la batería más adecuada para tu coche – ya sea un turismo gasolina, diésel, híbrido o eléctrico – y realizaremos la instalación de forma segura, cuidando la electrónica del vehículo.

En definitiva, las baterías han avanzado mucho y seguirán haciéndolo. Escoger bien el tipo de batería asegura un rendimiento óptimo y evita averías. Mantente informado sobre las novedades (la tecnología evoluciona rápidamente, desde baterías AGM más robustas hasta futuras baterías de estado sólido). Y ante cualquier duda, confía en profesionales. En ConecTaller estaremos encantados de ayudarte con el cuidado eléctrico de tu coche, porque una batería saludable se traduce en un vehículo confiable.